Cuando piensas en adquirir un departamento o casa, y no posees el dinero en efectivo, lo más común es solicitar un crédito hipotecario para así financiar una parte de la vivienda. Ahora bien, para ser sujeto de este instrumento financiero necesitas tener capacidad de ahorro y de crédito.
Si no sabes a lo que se refieren ambos factores, continúa leyendo para resolver tus dudas.
Entender esos dos conceptos no solo es parte fundamental de la educación financiera, sino que también involucra una decisión inteligente en cuanto a la compra de una propiedad.
Se puede definir como capacidad de ahorro a la reserva mensual de dinero que no se destina para gastos mensuales y que se guarda para cancelar o invertir en necesidades futuras.
Mediante la planificación del presupuesto mensual, las personas guardan el dinero en instrumentos que proveen instituciones, como una cuenta de ahorro o depósito a plazo, por ejemplo. La clave es ejecutar un plan de ahorro mensual, de manera regular y consistente en el tiempo.
También conocida como la capacidad de endeudamiento, es la cantidad de deuda que puede asumir un particular o una familia, dependiendo directamente de la situación personal, considerando los ingresos mensuales y los gastos.
Para evitar la insolvencia financiera, el Banco de España sugiere aplicar la regla del 35%, donde la deuda que se pretende asumir no supere el porcentaje antes mencionado de los ingresos netos mensuales.
Contar con un plan de ahorro para la vivienda es esencial si quieres solicitar un crédito, pues al momento de comprar una propiedad se debe contar con el pie, es decir, el financiamiento inicial. Por lo tanto, destinar un porcentaje de tus ingresos para ahorro permitirá que puedas solventar el primer pago del bien sin problemas.
En tanto, entre los requisitos mínimos que te solicitan las instituciones financieras para otorgarte un crédito hipotecario, está el de acreditar una renta mínima que sea compatible con la hipoteca que se va a adquirir, según las políticas de riesgos de las entidades.
El monto dependerá de cada institución a la que se consulte, pero se recomienda que el pago del dividendo no supere el 25% o 30% de la renta mensual.
Ambas capacidades afectan directamente la compra de la vivienda, pues si no tienes un plan, difícilmente lograrás juntar el dinero para el pie. Y la capacidad de crédito, determina el tipo de deuda a la que puedes acceder, para pagar sin problema la hipoteca solicitada.
Una vez que conoces los detalles de la capacidad de ahorro y crédito, es importante saber cómo es el proceso de compra de los distintos proyectos que tiene Inmobiliaria Alborada:
Primer paso que debes cumplir para adquirir el departamento de tus sueños. La cotización se realiza directamente en la sala de ventas con un ejecutivo.
Al momento de escoger la propiedad de tu preferencia, debes reservarla. Se cancela un monto de dinero que te asegura el bien por 10 días.
Se debe firmar un documento de “Promesa de Compraventa”, donde se pacta entre el comprador y la inmobiliaria, el precio y plazo de entrega de la vivienda.
Como sabes, para financiar una propiedad debes contar con una hipoteca. Esta es otorgada por una institución financiera. En nuestro caso, la puede gestionar el comprador o solicitarlo a través de nuestros ejecutivos.
Debes recordar que, para entregarte el financiamiento, debes contar con el pie, que se puede lograr mediante el ahorro para la vivienda.
Es el momento en el que se acredita la propiedad en el conservador de bienes raíces. La inmobiliaria es la encargada y el comprador solo debe firmar en la notaría cuando se indique.
Consta de varias etapas, donde se revisan documentación, pagos, entre otros. Y una vez se confirme que está todo en regla, se entrega la propiedad al comprador.
Ahora que conoces el proceso de compra, efectúa un plan de ahorro mensual y conoce tu capacidad de deuda para adquirir la vivienda de tus sueños. ¿Quieres saber más? Ingresa a Academia Alborada para aprender sobre estos y otros temas importantes.